Para el europeo una de las mayores sorpresas al llegar a la Argentina son las enormes extensiones de tierra. Ya a pocos kilómetros de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, puede ver grandes campos de cultivos de muchas hectáreas y en algunos casos de cría de ganado bovino en la pampa y en la Patagonia, ovino. Estas extensiones son las denominadas estancias. En la actualidad, inclusive, existen algunas, dedicadas solamente a recibir al turista europeo para familiarizarse con lo que alguna vez fueron las costumbres gauchescas.
Clase: sustantivo femenino singular.
La primera definición de estancia es: sala o habitación de una vivienda. Esta terminología se suele aplicar a las grandes y lujosas viviendas, por ejemplo un palacio.
También se llama de este modo a la estadía durante un determinado tiempo en un sitio.
Es además cada uno de los días en que un enfermo permanece en el hospital o clínica. Significa también la cantidad que por día, devenga el mismo hospital o clínica.
Se denomina así también a la cantidad de dinero que se paga por estar en un lugar público.
Para la Poesía es la estrofa constituida por versos heptasílabos y endecasílabos con rima consonante, en número y combinación variables, pero que se repiten a lo largo de todo el poema, excepto en la última que puede llegar a ser más breve.
Asimismo se llama así a la composición poética cuya distribución de rimas es repetida en sucesivas estrofas con el mismo esquema métrico. Cada estrofa se divide en la fronte y la coda o sírima y termina con un verso de enlace. Para Cuba, República Dominicana y Venezuela es la casa de campo que posee huerta y que se halla cercana a la ciudad.
En la América Meridional, específicamente Argentina, Chile y Uruguay se trata de un gran establecimiento rural, especialmente dedicados a los cultivos extensivos y a la cría de ganado bovino o equino.
Se suelen caracterizar por tener lo que se denomina casco, que es el centro edilicio en donde se encuentran las viviendas tanto de los propietarios como de los caseros -los encargados de cuidar el sitio, cuyo hombre normalmente es el capataz que es quien dirige las actividades del lugar y su mujer que se dedica a los quehaceres domésticos y culinarios del sitio- y de los empleados. También hay silos, establos, corrales, caballerizas, haras, bodegas, entre otros.
Estas extensiones se inician con la conquista de los españoles en el cono sur. En principio había chácaras, lo que luego se denominó chacras que se dedicaban a la agricultura, y las estancias, que se encargaban de la ganadería.
En el siglo XVII era una muy importante extensión de tierra concedidas a una persona, familia u orden religiosa. Inclusive desde el siglo XIX, comenzó su explotación por parte de empresas. De este modo una estancia en Argentina, comenzó a ser sinónimo de latifundio.
En la actualidad, existe un turismo rural mediante el cual se invita a que las personas conozcan estos establecimientos que ofrecen alojamiento, escuela de polo, paseos a caballo, fiestas gauchas, entre otros muchos atractivos, tanto para los mismos argentinos como para los extranjeros.
En cuanto al origen de este vocablo, este sustantivo está formado con raíces del latín. Lo constituyen el verto sto, stas, stare, steti, statum con el significado de estar parado; el sufijo -nt- que señala al agente más -ia que indica cualidad. De este modo su concepto etimológico es la cualidad del que está parado.
Alcoba, habitación; estadía, alojamiento; finca, hacienda.
“Luego de recorrer los barrios de la ciudad de Buenos Aires, los turistas fueron llevados a un día de campo para conocer una estancia argentina”. Se refiere en este caso, al sitio de explotación agropecuaria.
“La estancia es de origen provenzal y fue cultivada por los poetas del dolce stil nuovo, fundamentalmente Dante Alighieri y Francesco Petrarca”. En este ejemplo, se usa con el sentido de poesía.
“Le dijeron que debería prorrogar su estancia en el hospital ya que aún no se ha finalizado el tratamiento”. Aquí, se aplica al tiempo de permanencia.