¿Qué es cada carancho a su rancho?

Definición de cada carancho a su rancho

La definición de la expresión popular de Argentina, “cada carancho a su rancho” hace referencia a que es tiempo de que cada uno vuelva a su casa (en caso de que se esté en una reunión o fiesta) o de que se debe volver a la tarea que se estaba realizando anteriormente.

Esta frase no es de uso común actualmente, pero lo fue en algún momento, sobre todo en el área rural de donde provienen los dos sustantivos elegidos.

El “carancho” es un ave rapaz, típica carroñera que mide entre 55 y 60 cm, que tiene un cierto parecido al halcón. Se halla en el centro y sur de América del Sur, específicamente en los bosques y campo abierto de Argentina, Bolivia, Chile, Brasil, Paraguay, Uruguay y Perú.

Por su parte, el “rancho” es la vivienda rural por excelencia de Argentina, como de Paraguay, Brasil, Uruguay, Bolivia y Chile. Era el hogar del gaucho.

En su momento constaba de una planta o pieza de unos 4×4 a 5×5 metros con unos 3 metros de altura. Se construía de adobe o sea barro y paja con los que se levantaban las paredes y para el techo se usaba la paja quinchada que eran manojos de paja atados a un quincho con un junco y se disponía a dos aguas.

Cabe aclarar que si bien esta frase es típicamente Argentina, está relacionada con otras de uso habitual en otros países de habla hispana. Así en España su equivalente es “cada mochuelo a su olivo”. Aquí también el ave elegida es típica del país. El “mochuelo” es un ave rapaz pero, en este caso no se parece a un halcón, sino a una lechuza muy pequeña. Y el “olivo” sin dudas, es uno de los árboles típicos de la Península Ibérica. Sin embargo allí también existe otra variante de este dicho “cada mochuelo a su nido” en donde queda claramente delimitado su significado: de volver a la casa y atender a sus asuntos.

Sinónimos de cada carancho a su rancho

“Cada mochuelo a su olivo” (España); “cada mochuelo a su nido” (España); “cada chango a su mecate” (México); “cada perico a su estaca”; “cada gallo a su corral”.

Ejemplos de uso y frases

“Como ya era muy entrada la madrugada y los chicos continuaban la reunión, se levantó el padre susurrando: es hora de cada carancho a su rancho”. Se refiere en este caso, a irse a la casa de cada uno.

“Cuando vio que la discusión comenzaba a ponerse al rojo vivo intervino rápidamente diciendo que era hora de que cada carancho fuera a su rancho”. Aquí, se aplica a que cada persona se vaya a su lugar. La frase está conjugada.

 “Estaban todos los empleados alrededor del recién llegado, cuando vieron entrar al jefe y uno de ellos expresó: cada carancho a su rancho”. En este ejemplo, se usa con el sentido de volver cada persona a su trabajo.