La palabra trastorno se origina en el romance. Es un sustantivo que proviene del verbo trastornar, que es una forma del romance nacida de tras- (del latín trans- cuyo significado es al otro lado) y el verbo torno, tornare, tornavi, tornatum (tornear, girar, trepanar). Este vocablo deriva de tornus, torni (torno, instrumento para tornear). Este vocablo en el romance significa un giro a otro lado o en sentido inverso, esto en cualquier obra torneada es un problema. De allí que pase a utilizarse como concepto para la conciencia o conducta de algo o alguien que resulta anormal.
En cuanto al término bipolar deriva del latín. Formado por bi– prefijo que significa dos y polar que deriva de polus, poli (polo, eje, poste) y éste proviene del griego πόλος,πόλου (pr.pólos, pólu).
Clase: frase formada por un sustantivo, masculino, singular (trastorno) y un adjetivo, singular. En cuanto al género, todo adjetivo lo toma del sustantivo que acompaña. Pero en este caso, no toma la desinencia ni del género masculino ni del femenino, sino que permanece invariable, por terminar en -r (bipolar).
La Real Academia Española da como definición de trastorno “acción y efecto de trastornar”; “alteración leve de la salud”; “enajenación mental: locura: privación del juicio”. Y de bipolar: “que tiene dos polos”.
También se lo puede definir como “una enfermedad mental, fruto de un desequilibrio químico en unas sustancias que tenemos en el cerebro llamadas neurotransmisores. El enfermo oscila entre la alegría y la tristeza, de una manera mucho más fuerte que las personas que no padecen esta patología. Así, el enfermo sufre de episodios o fases depresivas, o eufóricas (maníacas).” (Enciclopedia Universal 2012).
Es imprescindible que el paciente sea medicado. Los psicofármacos suministrados son estabilizadores del ánimo (carbonato de litio, carbamacepina, olanzapina); antipsicóticos en caso de brotes maníacos, o eufóricos, alucinaciones (haloperidol, risperidona); antidepresivos (fluoxetina, paroxetina); ansiolíticos (benziodiazapinas).
Psicosis maníaco depresiva, trastorno maníaco depresivo.
“Al estudiar los síntomas del trastorno bipolar, se dio cuenta que su último novio sufría de esta enfermedad”. En este ejemplo se usa con el sentido de diagnóstico.
“Ya sabe que no puede dejar de tomar la medicación porque si no, las fases del trastorno bipolar que sufre desde hace años, lo llevan a vivir en un infierno”. Aquí se aplica a la necesidad de un tratamiento medicado de por vida.
“Sabiendo lo que significa porque lo vivió con su padre, ante el menor problema de alteraciones emocionales y conductuales de su hijo consultó con un psicólogo por temor a que el muchacho sufriera trastorno bipolar”. Se refiere en este caso al conocimiento de lo que implica esta afección.