¿Qué es la rodilla?

Cuando se quiere tener conocimiento de la palabra rodilla es necesario primeramente conocer su etimología de acuerdo a ello su procedencia es de un diminutivo latino conformado mediante la palabra “rota” que es rueda.

Pero continuando con una definición más específica consideramos de importancia poder consultar en la Real Academia Española

Es necesario comprender que la rodilla lleva a cabo una articulación de manera central de los huesos inferiores. Su conformación es mediante dos tipos de huesos uno reconocido como fémur y a su vez la tibia, pero así mismo dispone de un hueso de proporciones pequeñas denominado rótula. Y sobre todo se articula con la parte anterior e inferior del fémur.

Rodilla ligamentos: 

Debemos dar hincapié que la rodilla se encuentra rodeada de una capsula articular y distintos ligamentos que tienen como finalidad determinar su estabilidad. Y es importante saber que hay músculos potentes en las proximidades de la misma permitiendo cierta movilidad.

Señalamos que la rodilla, como destacamos anteriormente, está conformada por fuertes ligamentos que tienen como finalidad evitar que se produzca una luxación.

Tipos de ligamentos:

Entre los ligamentos más importantes se encuentran el ligamento lateral extremo, tiene como finalidad la unión del fémur con el denominado peroné, siempre a nivel de la rodilla. Y se encarga de evitar un movimiento conocido como de movilidad lateral destacando que no se genere el genu varum excesivo.

Ligamento lateral interno, genera la unión entre el fémur y la tibia. Ligamento cruzado anterior este se encarga de conectar la parte posterior-lateral del fémur, a la parte media de la tibia; originándose detrás de la rótula y por último se encuentra el ligamiento cruzado posterior, el mismo se desarrolla desde un área intercondílea posterior de la tibia y el menisco lateral.

Rodilla lesiones

Generalmente hay varias de ellas pero las más habituales son reconocidas como esguince, que se presenta cuando diversos ligamentos o tan solo uno sufren un excesivo estiramiento. Distensión, cuando primordialmente el tendón o quizás un músculo sufrieron un gran estiramiento. Daño en el cartílago, o más comúnmente llamado menisco. Y por último desgaste por el uso excesivo.