La palabra elitista proviene de elite o élite y ésta a su vez tiene su origen en el francés. En efecto elite era antiguamente el participio femenino del verbo élire cuyo significado era acto de elegir y lo elegido.
A su vez el verbo francés élire proviene del latín eligo, eligere, elegi, electum cuyo concepto es elegir, formado por ex más el verbo lego, legere, legi, lectum (recoger, leer).
Clase: adjetivo, singular. En cuanto al género, todo adjetivo lo toma del sustantivo que acompaña. Pero en este caso, no toma la desinencia ni del género masculino ni del femenino, sino que permanece invariable, por terminar en –a.
Para la Real Academia Española su definición es: “perteneciente o relativo a la élite o al elitismo”; “dicho de una persona: que se comporta como miembro de una élite, que manifiesta gustos y preferencias opuestos a los del común”, “partidario de una élite o del predominio de las élites.” Definiendo a élite como: “minoría selecta o rectora.”
La Enciclopedia Universal agrega: “Sociología: que se comporta como miembro de una élite y manifiesta gustos selectos”; “sociología: que es partidario de una élite o del predominio de las élites.”
Por su parte, es importante aclarar en cuanto a la palabra que le ha dado origen: élite o elite. Que el Diccionario panhispánico de dudas señala que ambas acentuaciones son válidas. […] Si bien [la pronunciación élite] es antietimológica, es hoy la más extendida incluso entre personas cultas; por ello la grafía élite y la pronunciación esdrújula correspondiente se consideran también correctas.”
Desde el punto de vista del comportamiento de este tipo de personas son las que se sienten diferentes a los demás, escondiendo una cierta arrogancia detrás de ese concepto. Se cree que es mejor que los otros, en lo que hace, en lo que piensa, en la riqueza que dispone, en lo que sabe, etc. En ese sentido se sienten los indicados para opinar o al menos para que se tenga en cuenta su opinión.
También se puede utilizar este término para referirse a personas que probadamente tienen un cierto privilegio o más poder que el resto, que se puede mostrar por ejemplo, en el acceso a determinados lugares “vip” que otros individuos no pueden por no tener los contactos que se lo permitan, el dinero, el poder, etc.
Igualitario, pluralista, multitudinario.
“La muchacha ha llegado muy triste a su casa, debido a que a fiesta que van a realizar ese fin de semana será totalmente elitista: solo para quienes son bailarinas clásicas”. Se refiere en este caso a una reunión temática que excluye todo lo demás.
“Aun siendo juzgado como un escritor elitista, con los años consiguió ser reconocido como un ícono literario universal”. En este ejemplo, se usa con el sentido de los temas y la manera de escribir de un autor.
“El vecino cree que en esa cinemateca son todos elitistas, porque solo aceptan la opinión de quienes estudian o han estudiado cine”. Aquí, se aplica refiriéndose a un tipo de comportamiento de acuerdo con una determinada élite.