Clavetear proviene de clavete diminutivo de clavo y este deriva del latín. Proviene de clavus, clavi con el significado de clavo, franja de púrpura cosida a la túnica. Este término se vincula con la raíz indoeuropea *kleu- que significa clavija, gancho.
A la raíz clav- se le añade el sufijo -ete que tiene connotación afectiva o despectiva; y el sufijo -ar con el concepto de acción verbal.
Clase: verbo, infinitivo, 1era conjugación.
La definición correspondiente a este verbo es sujetar y sostener con clavos.
Asimismo es adornar, ornamentar o revestir con clavos de algún metal valioso como oro o plata una puerta, un baúl, etc. Esto se puede realizar como una manera de restaurar el objeto si éste es muy antiguo y está deteriorado. Así se lo puede afirmar con clavos y a la vez se lo puede adornar, convirtiéndolo de este modo, en una antigüedad que se puede reutilizar.
Pero no solamente se clavetean objetos macizos, sino que también se puede hacer esto con cueros o pieles. Tal es el caso de la baca que es un cuero cosido y claveteado con anillos en las orillas para que se pueda sujetar con cuerdas a la barandilla de la diligencia donde se contienen fardos y equipajes. La diligencia que era un carruaje de cuatro ruedas de tracción animal, con armazón de hierro, madera o ambos materiales.
Mucho antes, en la República romana y en el Imperio romano también se utilizaba esta técnica de claveteado en la vestimenta. Así las caligae o sandalias que usaban las legiones romanas, los centuriones y sus ayudantes tenían esta técnica. Dichas cáligas consistían en una pieza de cuero recortada que se ataban en la parte superior del tobillo y en el centro del pie. Su suela estaba claveteada con clavos de hierro con la finalidad de reforzar el calzado, pero además le daba una mejor tracción y la posibilidad de provocar daño pateando con ellas.
También es poner herretes en una cinta o cordón.
Significa además terminar un negocio, asunto, expediente, etc. de la forma más completa y definitiva.
En Gastronomía clavetear es colocar uno o varios clavos de especies en un alimento como puede ser una papa, una naranja, un cebolla, un budín, etc. para que la especie pase su aroma y sabor.
En la cocina francesa este procedimiento se llama Clouter. Aunque también Clouter significa clavar otros saborizantes o aromatizantes efectuando pequeñas incisiones en los alimentos.
Cabe aclarar además que no es lo mismo que mechar, en cuyo caso se necesita usar una aguja mechadora que permite que el ingrediente que va a dar el sabor o aroma atraviese el alimento. En cambio cuando se clavetea solo se necesita efectuar un pequeño corte para clavetear con dientes de ajo, pepinitos, trufas negras, etc.
Adornar, guarnecer; terminar, concluir.
“Luego de numerosas reuniones se pudo por fin clavetear la importación de la materia prima para la fábrica”. En este ejemplo, se usa con el sentido de terminar un asunto definitivamente.
“Claveteó nuevos herretes en los cordones de sus zapatillas porque se le habían roto”. Se refiere en este caso a herretear. El verbo está conjugado.
“Para que se mantenga firme y para tapar las pequeñas hendijas, decidieron clavetear el viejo baúl de la abuela”. Aquí, se aplica refiriéndose a adornar con clavos.