El término nihilismo es un neologismo formado a partir del latín. En efecto, está compuesto por el pronombre indefinido indeclinable nihil, cuyo significado es nada, la nada, nulidad; más el sufijo –ismo que indica doctrina, creencia o postura vital. Puede considerarse entonces como su concepto etimológico la doctrina o postura de no creer en nada (política, religiosa o socialmente).
Clase: sustantivo, masculino, singular.
La Real Academia Española da como su definición “negación de todo principio religioso, político o social”; “negación de toda creencia.”
Para la Enciclopedia Universal, 2012 es la “actitud de rechazo de un individuo hacia los valores políticos, morales y culturales de la sociedad en que vive.” Agrega además: “término que fue popularizado por el novelista ruso Iván Turgenev en su novela Padres e hijos (1861) para describir las visiones de los emergentes intelectuales radicales rusos. Se trata principalmente de estudiantes de clase alta que estaban desilusionados con el lento avance del reformismo. El portavoz principal de esta nueva filosofía fue D.I.Pisarev (1840-1868), quien articuló un programa de utilitarismo revolucionario y consideraba la violencia como una herramienta para el cambio social.”
Escepticismo, incredulidad, negación.
“Ha tenido que preparar una clase especial sobre nihilismo ruso a pedido del profesor de Filosofía”. Se refiere en este caso al conocimiento de esta corriente filosófica.
“El término nihilismo es un neologismo introducido por F. van Baader en 1830”. Aquí, se aplica al origen de este vocablo.
“Quienes son los defensores del nihilismo consideran que es la respuesta orgánica al caos artificial e intencional que realizan la religión, los medios de comunicación y los gobiernos”. En este ejemplo se usa como la justificación de su aparición.