El término ser se origina en el latín. Proviene de sum, es, esse, fui con el concepto de existir, haber, estar, etc.
La palabra “dado” es el participio del verbo dar también procedente del latín: do, das, dare, dedi, datum.
“A” se origina asimismo en el latín como una preposición que señala persona, agente, punto de partida, tiempo a partir del cual, origen y procedencia, entre otros significados.
Clase: locución verbal formada por un verbo infinitivo 2da conjugación (ser), más un participio masculino singular (dado), más una preposición (a).
La definición de esta frase es: tener una persona inclinación o afición a alguna cosa.
De este modo se puede decir que alguien es dado a la lectura en el sentido de que lee mucho, o que es dado a la velocidad, lo que implica su afición a todo vehículo o deporte que la desarrolle.
Puede referirse asimismo a tener tendencia a alguna cosa. Y aquí se puede aplicar a la cualidad de lo que tiende hacia determinada forma, color, temperamento etc. Así se puede especificar, por ejemplo, que la moda actual tiende a la simplificación y practicidad. O que una persona es dada a ponerse colorada cuando le da vergüenza alguna situación o pregunta que la incomoda. O que es dada a hacer favores porque así lo siente o porque ha sido educada de esa manera.
Por su parte, puede especificar también propensión a cierta enfermedad. De este modo es correcto decir que una persona es dada a contraer resfríos o gripes todos los inviernos.
En todos los casos esta expresión puede aumentar su valorización con el adverbio “muy”, apócope de mucho. Y si se elimina la preposición “a”, cobra otro significado totalmente distinto. Cuando se menciona que “alguien es muy dado”, uso absolutamente coloquial, quiere decir que es una persona que le es fácil sociabilizar con los demás en cualquier ámbito o circunstancia.
Por su parte en el periodismo es común el uso de esta locución verbal con el verbo impersonal tal como: “se ha dado a conocer”; “se dará a firmar”. De este modo la noticia no se personaliza y se vuelve más formal, aunque en el caso del tiempo futuro (dará) cobra un valor hipotético.
Cabe destacar que esta expresión de diferencia de “ser dado de” en que en este caso la acción es efectuado por un sujeto que puede ser impersonal y recae sobre otro. Así se dice habitualmente que alguien es dado de alta en un hospital, de una enfermedad, afección, etc. En cambio en el caso de “ser dado a” la acción es realizada por el mismo sujeto, activo o paciente, sobre el que recae dicha acción. O puede ser efectuada también de manera impersonal.
“El joven es dado a todos los deportes náuticos”. Se refiere en este caso, a tener inclinación a ese tipo de actividad. La expresión está conjugada.
“El titular del periódico expresa en su primera plana que el faro de la ciudad sería dado a concesión para su explotación turística”. En este ejemplo se aplica refiriéndose a un monumento histórico.
“El profesor de lengua explica que la construcción ‘ser dado a’ tiene ese régimen preposicional y por lo tanto no puede ser sustituido por ninguna otra preposición”. Aquí se usa con el sentido de una regla gramatical.