La palabra armonía proviene del latín harmonía, harmoniae. Esta proviene, a su vez del griego αρμονία, derivado a su vez de ἁρμός cuyo significado es ajustamiento, combinación. En todos estos casos su concepto es juntar una cosa con otra con un ordenamiento placentero.
Clase: sustantivo, femenino y singular.
La definición dada por la Real Academia Española está referida en primer lugar a la música: “unión y combinación de sonidos simultáneos y diferentes, por acordes”; “arte de formar y enlazar acordes”. También se aplica con respecto a la sonoridad en la literatura “bien concertada y grata variedad de sonidos, medidas y pausas que resulta en la prosa o en el verso por la feliz combinación de las sílabas, voces y cláusulas empleadas en él”.
Desprendiéndose de lo anterior, se emplea en otros órdenes para explicitar la “conveniente proporción y correspondencia de unas cosas con otras”, y para referirse a la “amistad y buena correspondencia”, conceptos ambos que pueden ser utilizados en entornos políticos, culturales, religiosos, sociales, etcétera.
Melodía, acorde, musicalidad, cadencia, equilibrio, proporción; paz, concordia, amistad, hermandad, acuerdo, avenencia, conformidad; asentimiento, aprobación, consentimiento, unanimidad, consonancia, concordancia; encuentro acercamiento, aproximación.
Contraste, desarreglo; incompatibilidad, enemistad, enfado, discrepancia, incompatibilidad; desorden, discusión; agresión hostilidad, lucha, alboroto, colisión, desacuerdo.
“La característica de esta hermoso vals, es su armonía”. Ejemplifica este caso, a la concordancia en los acordes musicales.
“Al entrar en esa casa, siempre se respira alegría, amor y armonía”. Su uso, en esta oración se refiere a la cualidad de paz y concordancia entre las personas.
“En Proverbios y Cantares de Antonio Machado, es prodigiosa la armonía de las palabras”. Aquí se utiliza con referencia al ritmo sonoro que se da a partir de la combinación de los vocablos.