La palabra regurgitar tiene su origen en el latín. Proviene del verbo *regurgitare formado a partir de gurgito, gurgitare, gurgitavi, gurgitatum cuyo significado es hartar y está formado a partir de gurges, gurgitis que significa vorágine, abismo y que luego pasa a denominar a la garganta por sentido figurado. A la base del verbo –gurg- se le añade el prefijo re- cuyo concepto es repetición, intensidad.
El verbo en latín está vinculado a la raíz indoeuropea *gwer- tragar, devorar.
Clase: verbo, infinitivo, 1era conjugación.
Para la Real Academia Española su definición es: “Biol. Expeler por la boca, sin esfuerzo o sacudida de vómito, sustancias sólidas o líquidas contenidas en el esófago o en el estómago”; “rebosar: derramarse por encima de los bordes del recipiente”.
La Enciclopedia Universal, por su parte, define a este vocablo como: “Fisiología: expeler por la boca una persona o un animal el contenido del estómago”. “Fisiología: salir un líquido de su conducto orgánico de forma abundante”; “volver a echar por la boca, sin esfuerzo o vómito, los alimentos ya ingeridos, como hacen los niños con la leche mamada en exceso o algunas aves para alimentar a sus crías”. “Medicina: salirse un licor o humor, etc., por la mucha abundancia”.
Para el Diccionario Médico Eusal es el “paso de líquidos en sentido contrario al normal, especialmente la salida por la boca del contenido gástrico o esofágico sin esfuerzo de vómito; también el retroceso de sangre en el corazón a través de válvulas que no cierran bien (con insuficiencia); reflujo.”
Expulsar, expeler, vomitar, arrojar, lanzar, devolver, eructar.
“Ha sacado una foto en primer plano de un cóndor regurgitando comida para darle a sus polluelos”. Se refiere en este caso, al acto que realizan las aves para dar de comer a sus crías. El verbo está conjugado.
“A través de un reciente estudio se ha comprobado que los ancianos, los obesos y las embarazadas tienen una alta posibilidad de regurgitar bajo la acción de anestesias”. Aquí, se aplica al efecto que puede causar un anestésico.
“La pediatra tranquilizó a la madre explicándole que es normal que la bebé regurgite leche, aunque sea mucha, lo problemático sería que fuera ácido gástrico”. En este ejemplo, se usa con el sentido de dejar en claro que es normal que los bebés una vez que el estómago se ha colmado, expulsen la leche sobrante. El verbo está conjugado.