La palabra amigdaloide proviene de amígdala y esta procede del latín amygdala, amygdalae o amyndala, amyndalae usado este término tanto para nombrar al árbol como al fruto del almendro.
El latín lo recibió del griego que lo incorporó de otra lengua. En griego es ἀμυγδαλέα, ἀμυγδαλέας(pr. amygdaléa, amygdaléas) cuyo significado es el árbol del almedro y ἀμυγδάλη, ἀμυγδάλης (pr. amygdále, amygdáles) que significa almendra.
A la base amigdal- se le añade el sufijo -oide procedente del griego -οιδέα (pr.-oidea) que indica parecido a, que tiene forma de.
Por lo tanto el concepto etimológico de este término es lo que tiene forma o es parecido a la almendra.
Clase: adjetivo, singular, cuyo género es neutro por finalizar en -e.
La definición que corresponde a este sustantivo es roca volcánica en la que se hallan múltiples cavidades o burbujas llamadas variolas, en forma de almendra que se rellenaron con amígdulos o masas de minerales como la calcita. En cuanto al tamaño de estas cavidades pueden tener varios centímetros y se forman debido a la expansión de burbujas de vapor cuando la roca estaba en estado fluido. En ese caso se denomina textura vesicular. Cuando esas vesículas son ocupadas o rellenadas por otro material que se ha precipitado, allí se las llama amígdalas o textura amigdaloide. O sea que esta textura se presenta cuando las vesículas se rellenan de un material secundario.
Esta terminología pertenece a la Geología.
Mientras que en Paleontología se utiliza este adjetivo para referirse a un tipo de bifaces. El bifaz es una herramienta lítica prehistórica que es propia de la Edad de Piedra, particularmente del período Achelense y del Paleolítico Medio. Este nombre se le da a este instrumento porque es una pieza tallada, con dos caras (bifacial), de forma triangular, almendrada u oval. Es común que tenga una zona en punta y una base redondeada.
Los bifaces amigdaloides, que son los más abundantes dentro del grupo de los almendrados, tienen justamente como característica esa forma bien marcada, con la simetría e índices que le corresponden a esta categoría. Todos estos bifaces tienen la misma longitud y el mismo índice medio de redondeamiento de la base. Pueden tener un área en la punta ojival o puntiaguda, aunque a veces es redondeada.
Estos bifaces suelen ser idénticos a los cordiformes, con la diferencia de que estos últimos son planos y los primeros, más gruesos. Por su parte, los amigdaloides tienen más cantidad de corteza y una terminación más tosca.
“En el Museo de Paleontología se está realizando una muestra de diferentes bifaces del período Achelense, entre los que están los amigdaloides”. Se refiere en este caso al formato de este tipo de piedras prehistóricas.
“Exhibe un basalto amigdaloide con cavidades rellenas por calcita, a sus alumnos, para que vean cómo es esa textura”. Aquí, se aplica a la observación de estas estructuras en Geología.
“El hacha es un instrumento que se origina en la prehistoria donde se colocaban piedras de sílice talladas en forma amigdaloide que se sujetaban con ligaduras a un palo formando un ángulo recto”. En este ejemplo, se usa con el sentido de origen de una herramienta.