Titilar tiene una etimología incierta. No obstante, para algunos lingüistas su origen es a partir de una onomatopeya. Para otros, proviene del latín del verbo titillo, titillas, titillare, titillavi, titillatum cuyo significado es hacer cosquillas
Clase: verbo, infinitivo, 1era conjugación.
En cuanto a la definición de este verbo es moverse una parte del cuerpo con un temblor rápido y tenue como si estuviera palpitando.
Es muy común que esto ocurra en los párpados de los ojos, y se lo llama también palpitar, latir, temblar el párpado. Es común que ocurra con el inferior, pero también puede que pase con el superior.
Ocurre en un solo párpado de un solo ojo, y mirándose al espejo se ve casi imperceptiblemente un pequeño temblor o palpitación en la piel. Se percibe como un latido, o descargas de movimiento del párpado que a veces, llegan mover el globo ocular, temblando la imagen.
Su duración es de segundos a pocos minutos. Existen temporadas donde esto sucede con frecuencia para luego desparecer.
A este titilar del párpado se lo denomina técnicamente fasciculaciones del párpado o fasciculaciones del orbicular del párpado, ya que son las fibras de este músculo las que realizan esta contracción involuntaria. Esto es causado por la compresión que efectúan los vasos sanguíneos sobre el nervio troclear que es el que mueve al músculo, ejerciendo un especie de tirón en el ojo, que se siente como latido. Existen otro tipo de fasciculaciones en otros músculos de la cara pero esta es una de las más comunes y de las denominadas simples. Ya que ese temblor puede molestar pero no obstaculiza la visión. Por esa razón no necesita tratamiento.
Se asocia a la fatiga y al estrés, y al cansancio ocular, se lo relaciona también con el café, el alcohol el tabaco. En realidad hay que saber que no tienen relación con el ojo ni con la vista, por más que sea frecuente que se consulte a los oftalmólogos por esto.
Otro concepto es centellear, con cierta oscilación algún cuerpo luminoso. Esto se aplica a la manera en que se ven los objetos celestes desde la tierra y con el fenómeno de refracción de la luz en la atmósfera. Esto sucede porque sus capas más altas varían en la temperatura y esto produce variaciones en la refracción. El aire en esas capas se comporta respecto a la luz que le llega como una especie de sopa de lentes muy pequeños en movimiento continuo, enfocando la luz hacia todos lados. Y debido a que esa frecuencia es lenta, se la puede apreciar con el ojo humano. Todas las estrellas, salvo el sol, tienen un tamaño aparente menor que el de esas lentes y por eso su luz viene y va. En los planetas que tienen un tamaño aparentemente mayor, este fenómeno se compensa entre varias lentas y por eso se ve un intensidad más o menos frecuente.
Centellear, resplandecer, refulgir; temblar, palpitar, vibrar.
“Se quedaron mirando titilar las estrellas en el inmenso cielo de la montaña”. Aquí, se aplica a centellear los astros.
“Estaba algo molesta porque su ojo izquierdo continuaba titilando sin cesar”. Se refiere en este caso a palpitar una parte del cuerpo. El verbo forma parte de una frase verbal y está en gerundio.
“Se desilusionó tanto cuando pasó de ver titilar las estrellas de la constelación a verse firmes a través del telescopio”. En este ejemplo, se usa con el sentido de ver que centellea por un efecto visual.