Hojaldrado es una palabra derivada de hojaldre y esta se origina en el latín. Procede de foliatilis que su vez deriva de la palabra latina folium, folii con el significado de hoja, más el sufijo -ilis que indica posibilidad pasiva.
De este modo, el concepto etimológico de este vocablo es que se puede deshacer en hojas.
Clase: adjetivo, masculino terminación en -o / femenino terminación en -a, singular.
La definición de este vocablo es en el Arte Culinario toda masa o pastel que está hecho de hojaldre o que se parece a él. Definiendo a hojaldre como masa de origen árabe que se elabora con harina e igual cantidad de grasa, o manteca o margarina, agua y sal, trabajada de tal manera que al ponerla en el horno a cocinar forma hojas delgadas superpuestas.
En realidad para conseguir ese resultado se debe mezclar la harina con agua y sal y sobre esa masa se coloca la grasa o manteca, doblándose sobre sí misma varias veces. El hecho de repetir varias veces esa operación da como resultado que queden las láminas finas. Al cocinarse, esas láminas retienen el vapor generado con el agua de la masa y se separan como si fueran las hojas de un libro.
De acuerdo con la forma en que se elabore el hojaldre se puede denominar:
-francés que es cuando la masa envuelve la grasa o manteca.
-inverso cuando la materia grasa envuelve a la masa.
-rápido cuando la masa es un sola elaboración donde todos los ingredientes se unieron al inicio.
El antecedente más antiguo de los productos hojaldrados se cree que fue el bstela árabe o también llamado pastela que en España dio finalmente los pasteles. Tradicionalmente eran de hojaldre con variados rellenos, aunque la pastela se confecciona con masa filo o sea hoja a hoja.
Actualmente el hojaldrado se utiliza para los platos salados como el vol-au-vent como en los dulces como las milhojas.
En España existen muchas variedades tanto saladas como dulces típicas de cada región.
Así se encuentran:
– los miguelitos que son unos pasteles hojaldrados rellenos con crema pastelera sobre los que se espolvorea azúcar impalpable. Son propios de La Roda en Albacete.
– las pantortillas que es una especialidad de Reinosa, Cantabria. Hechas con masa de hojaldre, capa de azúcar caramelizada arriba.
– los sacristanes de la región de Liérganes en Cantabria, con forma de lacito.
– las corbatas típicas de Unquera y San Vicente de la Barquera, Cantabria. Con forma de corbata hecho con hojaldre, azúcar, manteca, huevos, harina de trigo y almendras y recubierto con una capa de azúcar de almendras.
– los cruasanes conocidos en Francia como croissant, en Argentina, Uruguay y Chile por medialunas y en otros países de Latinoamérica como cachitos, cangrejitos o cuernitos. También con masa de hojaldre, levadura, manteca o margarina.
“Compró tapas hojaldradas para hacer empanadas capresse de mozzarella, albahaca y tomate”. En este ejemplo, se usa con el sentido de la masa para un tipo de comida salada. Es femenino plural.
“Todos comentaron lo exquisita que resultó la torta milhojas hojaldrada rellena de dulce de leche y cubierta con chocolate blanco y praliné”. Se refiere en este caso a un postre. Es femenino singular.
“Para la comida familiar preparó humita en paquetitos hojaldrados”. Aquí, se aplica a una comida típica. Es masculino plural.