Obstinado es un término proveniente del latín. Procede de obstinatus, obstinata, obstinatum participio del verbo obstinor, obstinaris, obstinari, obstinatus sum (resistir oponiéndose, perseverar). Este verbo está formado por el prefijo ob- que señala oposición o enfrentamiento y por un radical –stanare que proviene del verbo stare (ver estatal).
Así, el concepto etimológico de esta palabra es que persevera, que resiste oponiéndose.
Clase: adjetivo, masculino -o / femenino -a, singular.
La primera definición de esta palabra es que no cede ante argumentos, ruegos, ni advertencias; que se obstina. Definiendo a obstinar como mantenerse en una decisión y tema y continuar en ellos a pesar de que se le ruegue, explique o se lo intente persuadir y que, además, no cambia de parecer ni ante los obstáculos.
Aun con dificultades delante que le están demostrando que está incurriendo en un error, la persona continúa con su acción o planteo que para él es el correcto. Desde ya que quien se comporta de esta manera ni siquiera está registrando lo que le devuelve el entorno o el objeto o la situación que tiene delante y lo único que hace es encerrarse en sí mismo.
Por esa razón es difícil poder conseguir que alguien así pueda modificar su conducta o una decisión que haya tomado, aun cuando esas decisiones pueden afectar su vida. Un claro ejemplo es aquel sujeto que ha decidido comprar algún artículo como puede ser un electrodoméstico, o computadora o un vehículo al que quienes lo conocen le recomiendan que no lo haga. Y a pesar de que le puedan dar consejos razonables que tengan que ver con la marca, el tipo de producto, el modelo, etc. el obstinado dejará que hablen y hará lo que le parezca.
Aunque también existe aquel obstinado que deja hablar y para que no le sigan insistiendo no dice ni sí ni no, solamente permanece callado, dando la sensación de que entendió y luego por su actuación uno se da cuenta de que continuó con su creencia.
Es que este es el problema, las creencias arraigadas dentro del individuo, que se toman como única y verdaderas sin confrontarlas con el contexto y poder flexibilizarse.
La segunda acepción de este vocablo es tenaz y perseverante. En este caso, la visión es totalmente diferente ya que se trata de alguien que ante las dificultades no se acobarda, sino que las convierte en un incentivo para continuar adelante con lo que quiere realizar.
Aquí no hay irreflexión, ni terquedad, hay voluntad y laboriosidad, certeza de un objetivo al que se quiere llegar.
Terco, tozudo, testarudo, empecinado, obcecado, obseso.
Dócil, condescendiente, flexible.
“Es un piloto obstinado por eso aunque salga con su fórmula 1 en las filas posteriores puede llegar a ganar la carrera”. Se refiere en este caso, a una persona tenaz y perseverante.
“La madre dijo con vehemencia que su hija no era obstinada, era necia”. En este ejemplo, se usa con el sentido de alguien que su terquedad lo lleva a la necedad. El adjetivo está en femenino.
“Ser un estudiante obstinado le valió obtener el mejor promedio de su promoción. Aquí, se aplica a alguien que se empeña y trabaja.