Cuando se habla de Santa Sofía, se puede estar haciendo referencia a la mártir cuya festividad es el 30 de setiembre, o la basílica Hagia Sophia (Santa Sabiduría), ubicada en la ciudad de Estambul, en Turquía, erigida en su honor.
Clase: construcción sustantiva formada por un sustantivo común femenino (Santa) y por un nombre propio (Sofía)
La definición correspondiente a Santa Sofía es una antigua basílica ubicada en Estambul, Turquía con una cúpula cuyo diseño se considera la síntesis de la arquitectura bizantina. Fue conocida por haber sido la catedral con más superficie durante casi mil años, hasta que se terminó la catedral de Sevilla en 1520
Inaugurada en el año 360 y hasta el 1453 sirvió como catedral ortodoxa bizantina del rito oriental de Constantinopla, exceptuando el período entre el 1204 y 1261 en que fue convertida en catedral católica. Esto fue realizado por los cruzados durante el patriarcado latino de Constantinopla. Cuando el Imperio otomano conquistó Constantinopla, el edificio fue transformado en mezquita desde 1453 hasta 1931 y en 1935 se inauguró como museo.
Si bien se considera que su construcción se inició precisamente en el año 325 hasta el 360, en realidad se trata de la primera iglesia en Constantinopla, llamada Magalé Ecclesia, pero que durante el siglo V se quemó.
Fue así que durante el imperio de Justiniano se reconstruyó a partir del año 532 hasta el 537, de la mano de dos arquitectos griegos: Antemio de Tralles e Isidoro de Mileto. Concebida como la gran iglesia del emperador tiene elementos en los que se unifica la tradición oriental mesopotámica así como las de Persia y Siria, fundidas con las tradiciones romanas, griegas y paleocristianas, además de algunas adiciones musulmanas.
Sin dudas su gran protagonista es la cúpula de 31 metros de diámetro y 56 de altura, articulada con cuarenta nervios y cuarenta elementos curvos apoyados sobre cuatro pechinas. Y no tiene tambor por el sistema de soporte con al que se concibió.
Cabe destacar que desde sus inicios esta iglesia fue convertida en necrópolis imperial, en la cual descansan los restos de muchos emperadores distribuidos en dos mausoleos exteriores. Uno al sur del ábside, el de Justiniano y el otro al norte, el de Constantino. Mientras que alrededor de la iglesia se hallaban los stoai, en donde se colocaban los sarcófagos de mármol, recubiertos de plata y piedras preciosas de algunos basileis.
En 1453 cuando Constantinopla fue tomada por los turcos, la iglesia Santa Sofía se convirtió en mezquita. Debido a esto se levantaron los minaretes exteriores, a su vez se transformó la decoración del interior, en la que se agregaron los cuatro emblemas circulares en las esquinas de la planta. También se reorientó el templo, alterando su eje longitudinal dejando el ábside de la iglesia relegado a segundo plano.
Otros cambios sucedieron en este período tales como el recubrimiento con yeso de los frescos de santos cristianos. Se construyó un altar en la parte este ya que el ábside debía estar ubicado en dirección a la Meca, sumándose posteriormente otro minarete en la esquina nordeste, entre otras modificaciones.
Ya en 1935 Santa Sofía se convirtió en museo luego de una importante restauración.
En tanto, la etimología de esta construcción es:
“Santa” es la forma femenina de santo, palabra que proviene del latín. Se origina en sanctus, sancta, sanctum, adjetivo y participio del verbo sancio, sancis, sancire, sanci/sanxi, sancitum con el significado de hacer inviolable, consagrar, sancionar.
“Sofía” deriva del griego. Procede de σοφία, σοφίας (pr. sofía, sofías) cuyo concepto es sabiduría.
“Frente a la Basílica de Santa Sofía de Estambul, separada por un parque con fuentes se encuentra la mezquita de Sultanahmet, conocida como la mezquita azul”. Aquí, se aplica a otro monumento religioso de gran importancia y belleza.
“La cúpula central de Santa Sofía está construida por ladrillos colocados de canto y lechos gruesos de mortero”. Se refiere en este caso a los materiales utilizados para la construcción de la cúpula.
“Para poder visitar Santa Sofía debió pagar una entrada como sucede con todo museo”. En este ejemplo, se usa con el sentido del pago que se debe hacer para conocerla actualmente.