Bueno es un término que proviene del latín. Se origina en el adjetivo bonus, bona, bonum con el mismo significado que ha llegado al español.
Esta palabra está relacionada con la raíz indoeuropea *deu-2 con el concepto de realizar con eficiencia, realizar correctamente.
Clase: adjetivo, masculino -o / femenino -a, singular.
La primera definición de esta palabra es alguien que tiene un carácter bondadoso y pacífico. La segunda, se aplica cuando acompaña al verbo “ser” o yuxtapuesto a una ocurrencia, o frase graciosa y oportuna.
Otras definiciones son: que es útil, conveniente o que beneficia a una persona o cosa; que reúne las condiciones específicas de su tipo o género para cumplir correctamente su función; que es agradable a los sentidos o que es agradable para el espíritu. También puede definirse más precisamente como gustoso o apetecible. En este último caso se refiere a la manera de estar preparada alguna comida o a algo que es agradable al paladar.
Suele aplicarse además a obras de arte, de valor.
Asimismo se aplica con el sentido de que se ha repuesto de una enfermedad; que puede ser usado por no estar demasiado gastado o deteriorado; que tiene una gran importancia, intensidad o tamaño, que es sorprendente o extraño.
Se utiliza igualmente, en exclamaciones de sentido irónico del tipo: “¡En buen momento he llegado!”.
Cuando se antepone a un nombre tiene valor hiperbólico, semejante al que tiene “bien” cuando se aplica al verbo o al adjetivo.
Y se debe recordar que antepuesto a un sustantivo, cuando el adjetivo está en masculino singular, se apocopa, o sea pierde la vocal -o.
Asimismo puede aparecer entre signos de admiración: “¡Bueno!” y se emplea para darse por enterado de alguna indicción que se recibe y asentir o aceptarla. También significa expresar asentimiento o conformidad.
También puede expresar resignación con referencia a algo que se ve o escucha y que cansa o contraría.
En cuanto al comparativo, tiene dos formas:
a-mejor que se aplica a todos los casos referidos anteriormente.
b-más bueno. Se emplea en el caso de “bondadoso” y de “gustoso, apetecible”
En los dos casos se utiliza referido a personas, animales, sentimientos, acciones, etc. que obran bien desde el punto de vista moral o espiritual; que tienen sentimientos bondadosos y compasivos, capaces de hacer el bien a otros y de alegrarse por su felicidad.
En cuanto al superlativo existen varias formas:
-muy bueno.
-buenísimo, formado sobre el adjetivo más el sufijo -ísimo.
-bonísimo que es el superlativo irregular formado con la raíz del adjetivo latino “bonus” más el sufijo -ísimo. Esta forma actualmente ha caído en desuso.
-óptimo que significa “bueno en grado sumo”. Este adjetivo suele utilizarse en general, en lengua escrita cultal.
Tanto buenísimo, como bonísimo como óptimo no admiten marcas de grado por lo tanto, es incorrecto decir más buenísimo, menos óptimo, menos óptimo, tan bonísimo.
Bondadoso; ingenuo, crédulo; conveniente; agradable, sabroso.
Malo, perverso; pícaro; perjudicial, desagradable, asqueroso.
“Hemos pasado una buena jornada todos juntos en este parque”. Aquí, se aplica a algo agradable al espíritu. El adjetivo está en femenino.
“Al ver el lugar elegido, todos se han dado cuenta que es un sitio muy bueno para acampar”. En este ejemplo, se usa con el sentido de algo beneficio o conveniente para algo.
“Ni bien llegó a su casa, lo estaban esperando sus padres quienes le dieron una buena reprimenda”. Se refiere en este caso a algo de gran intensidad. El adjetivo está en femenino.