El término canino proviene del latín. Se origina en caninus, canina, caninum, adjetivo formado por la raíz del sustantivo canis, canis cuyo significado es perro, can; más el sufijo que indica relativo o perteneciente a.
Por lo tanto su concepto original es lo relativo o lo que pertenece al perro.
Clase: adjetivo, femenino en -a, / masculino en –o, singular // sustantivo, masculino, singular.
Su definición se desprende de su etimología y es del perro, o que pertenece o está relacionado con el perro.
El perro llamado canis lupus familiaris es una subespecie del canis lupus (lobo), perteneciente a la familia Canidae o cánidos del orden Carnívora. Entre sus características más destacadas es tener un oído y un olfato sumamente desarrollados, sobre todo éste último, que se ha convertido en su fundamental órgano sensorial.
Científicamente se ha comprobado que debido a su domesticación, el organismo del perro se ha ido adaptando a cierta clase de alimentos tales como el almidón.
Suele vivir entre 8 y 15 años, siendo los más longevos los que pertenecen a las razas pequeñas. Pero justamente estas razas, son las que tienen mayor esperanza de vida que las grandes o gigantes, llegando vivir hasta 20 años, e incluso más.
Su temperatura corporal oscila entre los 38,5 y 39,5ºC, y es muy propenso a sufrir hipertermia cuando hay elevada temperatura y/o humedad.
Existen unas 800 razas, muchas más que las de cualquier otro animal, que tienen diferentes tamaños, temperamentos y fisonomías, además de diversos colores y tipos de pelo de acuerdo con la raza. Son los animales de compañía por excelencia, junto con el gato. Pero también se pueden convertir en animales de guardia, perros guía, pastores, boyeros, etc.
Además de los que tienen una raza determinada existen los híbridos, que son los más numerosos en el mundo. Cuando la hibridez es de primera generación e inclusive esto se transmite a sus crías, tienen una mejor salud que la de sus padres debido a la heterosis o vigor híbrido.
En Anatomía se designa con este adjetivo al músculo “canino” que es el que se encuentra en la cara y cuya función es elevar y dirigir hacia adentro las comisuras labiales.
Se encuentra en la fosa canina del maxilar superior y tiene forma cuadrilátera. Se fija por debajo en la mucosa y la piel de la comisura de los labios, y por arriba, en la fosa canina, abajo del agujero infraorbitario.
Se relaciona con los nervios, vasos suborbitarios, piel y el elevador propio del labio superior, en su cara superficial. En su cara profunda envuelve una parte del maxilar superior.
Está inervado por el nervio facial.
También se utiliza este término para referirse al diente de corona cónica y aguda o también llamado colmillo. En este caso es sustantivo.
Los colmillos, que son cuatro (dos superiores y dos inferiores), se encuentran entre las arcadas dentarias delimitando el sector posterior del anterior.
Su función es desgarrar de manera lateral los alimentos.
Perruno.
“El chico llegó a su casa desde la escuela diciendo que viene con un hambre canina”. En este ejemplo, se usa con el sentido figurado de hambre voraz tal como tienen los perros cuando van a comer. Es adjetivo femenino singular.
“Cuando al pequeño le salió su primer canino, lo señalaba y lo mostraba porque le dolía la encía”. Se refiere en este caso al diente. Es sustantivo
“Por primera vez en la exposición canina las entidades protectoras de animales participaron llevando perros callejeros que fueron dados en adopción”. Aquí, se aplica a una exposición de perros. Es adjetivo femenino singular.