El término existencialismo es un neologismo acuñado a partir del sustantivo existencial que se origina en el latín. Procede de exsistentialis, exsistentiale. Este adjetivo está formado por el prefijo ex- que señala separación del interior; el verbo sisto, sistis, sistere, stiti, statum cuyo significado es colocar, poner, detener, tomar posición, estar fijo; el sufijo –nt que señala agente; el sufijo -ia que indica cualidad y por último el sufijo -alis que indica relación o pertenencia.
A ese adjetivo se le ha agregado el sufijo –ismo proveniente de –ismus que a su vez lo ha tomado del griego -ισμος (pr. ismos) indicando doctrina, sistema, creencia.
De lo anterior se infiere como concepto etimológico de esta palabra la doctrina de lo que pertenece a la existencia.
Clase: sustantivo, masculino, singular.
Puede darse como definición de esta palabra, dentro de la filosofía, al movimiento que considera la experiencia inmediata de la existencia propia como la base y el fundamento del conocimiento de la realidad.
Así como su tema central está centrado en la existencia del ser humano, con sus vivencias, por extensión a esto también analiza el carácter de la elección humana. Por esta razón, sus principales teorías se dedican a los problemas que conciernen a la ontología y a la decisión o elección.
Se encuentra su origen en los escritos de Soren Kierkegaard (1813-1855) a quien se lo considera antecedente de esta doctrina basando su filosofía en la subjetividad e individualismo moral, responsabilidad, libertad y también en la angustia desde el punto de vista cristiano.
Estos temas van a ser retomados por Martin Heidegger (1889-1976) y Jean- Paul Sartre (1905-1980). El primero tiene un fuerte pesimismo al considerar que el hombre ha sido arrojado en el mundo. La existencia humana o “Dasein” en realidad le ha sido impuesta y de allí se encuentra angustiado al revelársele su mundanidad, o sea al hecho de que si bien puede existir en el mundo, inexorablemente tiene que morir.
Jean-Paul Sartre, es considerado el fundador del existencialismo, ya que fue el primero en utilizar este término referido a su filosofía.
Lo mismo que Heidegger plantea al ser humano como arrojado “yecto” añadiéndole el prefijo pro-. De este modo, el hombre se convierte en un proyecto en situación. La angustia del alma que es consciente de estar condenada a ser libre, implica en cada momento de la vida la total responsabilidad de renovación.
Este concepto de la libertad y el deber de la autodeterminación, y libertad de elección de toda existencia humana también puede llevar a situaciones perversas que tiene la humanidad de negar su responsabilidad ante la vida y por lo tanto huir de la libertad que tiene.
Otros filósofos existencialistas son: Merleau-Ponty, Martin Buber (existencialismo judío); Jacques Maritain y Gabriel Marcel, (existencialismo católico). También se pueden nombrar entre otros a Miguel de Unamuno, Ortega y Gasset, Edith Stein, Nicola Abbagnano, Karl Jaspers y Max Scheler.
“En su monografía vincula el surrealismo y el existencialismo dentro de la vanguardia artística de la posguerra”. Se refiere en este caso, a una comparación con otro movimiento filosófico y artístico.
“El filósofo asegura que el existencialismo le da total libertad al hombre para elegir su destino al rechazar al socialismo como a la religión”. Aquí, se aplica a una definición de este movimiento.
“El crítico literario ha dicho que las novelas y las poesías de Blai Bonet son una demostración del existencialismo cristiano”. En este ejemplo, se usa con el sentido de un autor literario que adscribe a esta doctrina.