Conocida desde la antigüedad, la mampostería en seco es un tipo de construcción mediante la cual se han realizado e inclusive se pueden realizar aún muros e inclusive viviendas. Es recomendable en cuanto a la economía de materiales, y a la posibilidad de que se pueda construir con relativa facilidad.
Para todo aquel que guste de las viviendas rústicas, este es el tipo de mampostería recomendada.
Clase: locución sustantiva formada por un sustantivo femenino singular (mampostería); una preposición (en) y un adjetivo masculino singular (seco).
En cuanto a la definición de mampostería en seco es aquel sistema de construcción tradicional que erige muros y paredes, con diferentes objetivos, a través de la colocación manual de materiales o elementos que están superpuestos sin ningún tipo de relleno, recubrimiento, ni sellado. Esto es no usa mortero y se la considera un tipo de mampostería sin reforzar. A diferencia de la mampostería reforzada que se realiza con un mortero de cemento o de cal.
De este modo los elementos que se denominan mampuestos se colocan uno por uno para conseguir estabilidad en el conjunto. Los huecos que quedan entre dichos mampuestos se terminan de unir con piedras pequeñas y de poco peso denominadas ripios. En este sentido se diferencia de la mampostería reforzada que utiliza materiales tales como ladrillos o bloques de cemento prefabricados que siempre van unidos por alguna argamasa de cal y arena, o de cemento en la actualidad. O también barro y paja, en el caso de construcciones ecológicas.
En el caso en que se quiera reconstruir un muro seco, se debe desmontar la pared antes de comenzar con el trabajo y se buscan piedras.
Posteriormente se excava debajo de la pared hacia afuera unos 45,72 cm y unos 10,16 cm de profundidad, donde se coloca arena. Allí se pone, en primer lugar una gran piedra plana en el punto de partida de la pared. Luego se colocan presionando grandes piedras planas de dos en dos en la zona excavada. Así como también piedras desiguales unas con otras en la arena con un mazo de goma.
Luego se rellenan las griegas con pequeñas piedras. Y se colocan apareando dos grandes rocas sobre la piedra de unión. Se debe tender un puente sobre la segunda hilera de piedras fijándolas entre las piedras que ya están emparejadas en la base. Asimismo se van agregando hileras de piedras inclinándolas hacia el interior para que las anteriores sean más anchas. Siempre el puente de piedras debe cubrir los espacios de las piedras que están bajo de ellas.
Finalmente se van rellenando las grietas con pequeñas piedras.
En tanto la etimología de esta locución es. Para el caso de “mampostería” es una palabra formada sobre mampostero, que a su vez se ha formado a partir de mampuesto. Esta está constituida por las siguientes raíces latinas: manus, manus con el significado de mano; positus que es el participio del verbo pono, ponis, ponere, posui, positum (poner) proveniente a su vez de posinere, formado por po- (fuera) y por sino, sinis, sinere, sivi, situm (permitir, dejar). A esa base se le añade el sufijo -ería que indica en español que indica relativo a.
La preposición “en” también proviene del latín. Deriva de “in” una preposición con el concepto básico de interioridad aunque tiene otros matices.
Igualmente “seco” deriva del latín. Procede de siccus, sicca, siccum (ver seco).
Mampostería seca.
“El estilo de construcción de mampostería en seco fue uno de los más usados antiguamente en Irlanda, para muros de piedra simple, doble piedra o combinados”. Se refiere en este caso, a este tipo de construcción en aquel país europeo.
“El arquitecto sostiene que es posible realizar una construcción ecológica en ese lugar, que sea de mampostería en seco”. En este ejemplo, se usa con el sentido de su aplicación en la actualidad.
“La mampostería en seco fue utilizada por los egipcios en la construcción de las pirámides”. Aquí, se aplica a la antigüedad de este tipo de construcción.